El 1 de Junio de 2018,
luego de cuatro años, Amaia Montero presenta al mundo su nuevo
disco, con un carácter reivindicativo, pues así lo manifestaba su
primer sencillo “Nacidos para creer”, un striptease emocional,
lanzado tiempo atrás, y con un sonido más rockero y crudo sin
desatender, claro está, su vena más romántica con baladas que
atraviesan de lado a lado, con su segundo sencillo “Buenos Aires”.
La nueva apuesta de Sony Music producido por Martin Terefe, fue
grabado entre Londres y Madrid contando con un plantel de musicos de
primera línea. Debutó en el numero 1 de Itunes en España, Brasil y
Chile entre otros países y frente a ella se abre una etapa de
contacto directo con el público en un tour que la llevará por
España y Latinoamerica.
La
sociedad que hemos construido es lo suficientemente osada y estúpida
como para permitirse el lujo de ya no sólo opinar, sino de criticar
la forma de vivir otras personas, ya sea en lo referente a sus
acciones, su aspecto físico o sus principios e ideales. Nacidos para
creer es un escupitajo de ácido que cae de lleno en esos osados de
vidas tristes y almas vacías que cargan de tinta sus proyectiles con
ánimo de ofender y dañar, sin miramientos, sin consideración...
sin humanidad. Estribillo potente, rebosante de rabia y orgullo a
partes iguales, pero sobre todo en el que centellea el amor propio
como bandera a seguir.
Mejor momento:
“Nadie conoce a nadie, muchos no entienden de lo que saben, o
afilar un puñal en cada pedestal”
NOTA: 9,0
El dolor de no
ser. El dolor de no saber por qué. El dolor de no saber qué hacer.
En esta balada de sonido innovador, donde la donostierra se atreve
casi a rapear entre susurros que recuerdan el sonido avejentado de
los vinilos, el sufrimiento se desangra mostrando la cruda realidad
de una ilusión que tal como vino se marchó... inesperadamente.
Recuerdos que se arremolinan resucitan la tortura que no cesa, que
nunca cesa... Drama
Mejor momento:
“Tal vez lo triste es no estar triste y que dé igual”
NOTA: 9,0
No hay título
mejor para explicar lo que es el amor. Cuando se presenta de pronto,
sin esperarlo, y es capaz de un solo plumazo derrumbar todos los
muros que tanto esfuerzo costaron construir. Pero no importa, porque
somos tan el uno para el otro, que no existe mejor escenario para
esas ruinas. Puro romanticismo estalla en el tercer corte, tan puro y
hetereo, tan fresco y soñador... Una balada impresionante que te
envuelve desde la primera hasta la última nota.
Mejor momento:
“No me imagino ya sin ti la vida, y soy una versión que no
esperaba”
NOTA: 9,5
AVE FÉNIX
Esta fábula de
canción es una oda a la poesía. Repleta de metáforas pretende
plantarle cara a la mala suerte, a la mala energía, a la mala
racha... Inspiradora, con armónicas de fondo, Amaia nos empuja a
despertar del letargo, a salir del barrizal y tirar para delante.
Imprescindible cambiar de actitud y pensar en positivo. Sacúdete la
mala onda y levanta el ánimo... Renace cual Ave Fénix.
Mejor momento:
“No te des gato por liebre si tu amor propio te es infiel, y hazle
caso a tu Ave Fénix, arde y luego ponte en pie”
NOTA: 8,0
Balada muy
Montero, de letra ambigua, en la que sobrentiendo relata la historia
de una pareja que se aleja cada vez más sin poder remediarlo a pesar
de que en algún momento siente la nostalgia de los buenos momentos y
tratan de enmendarlo. No obstante, nada puede hacerse, pues su
historia está herida de muerte y la separación es irremediable.
Mejor momento:
“Quien quiere hacerse el muerto cuando el reverso del espjo es una
playa en invierno, un adiós sin avistar...”
POR TI
Perder la cabeza
cuando se está enamorado parece que vaya de serie. El problema
resulta cuando esa pérdida implica también la pérdida de la noción
de quien eres. Cuando te olvidas de tus intereses, de cuidarte y te
abandonas a quien a medida que conoces descubres es tan tóxico como
una droga mala, cabas tu propia tumba. Meritorio es darse cuenta a
tiempo y recobrar las riendas de tu vida... Hoy soy feliz...
Mejor momento:
“Quédate con toda tu mierda y olvídate y déjame en paz, sólo
olvídame...”
NOTA: 9,5
Quizás estemos
ante una de las canciones más Montero del album, así como también
la que más puede recordarnos a su etapa en LODVG. La donostiarra
hace gala de su vena más popera durante casi cuatro minutos,
moldeando una historia de amor, nostalgia y candidez. Amo sus coros
iniciales... tan épicos.
Mejor momento:
“Yo solo puedo estar contigo o lejos de mí”
NOTA: 9.0
FINAL FELIZ
Aterrizamos en una
nueva pista que compositivamente nos recuerda a la primera etapa
profesional de Amaia. Una balada de estribillo afligido, empañada
por una nube gris pintada por el desamor. Una gran canción de la que
destaco, fundamentalmente, su instrumental. Abrumadora.
Mejor momento:
“Me conté una historia que acaba así: con mi dirección en tu
D.N.I.”
NOTA: 7,5
Acelerón del
tempo. Más pop para lanzar el mensaje más positivo que puede nacer
de cometer errores... que de ellos se aprende. Comprendo donde falle,
donde caí, donde me abandoné... pero benditos todas esas
equivocaciones que ahora me hacen ser lo que hoy soy. La letra más
trepidante, inteligente y cargada de sensatez del disco.
Mejor momento:
“Me equivoqué al tirar las armas cuando iba ganando yo” // “Me
equivoqué (…) cuando saltaba un aro en llamas por no herir al
domador” // “Me equivoqué (…) cuando por no tener dos caras me
las partieron las dos” // “benditos sean los errores (…) los
golpes que te enseñan a saber caer, también la poesía de las
derrotas, la vida en ruinas bajo la ropa” .
NOTA: 10
LA ENREDADERA
Advertimos el
final del disco en el corte más sorprendente del mismo. Encontramos
a Amaia en un nuevo registro, en el que su voz solo se arropa por las
cuerdas de una guitarra española y alma flamenca. Una apuesta por el
amor. Baja su puntuación porque se hace un poco larga, me sobran los
dos últimos minutos de canción.
Mejor momento:
“Te voy a poner el mundo al revés, el diablo en el cuerpo, veneno
en la piel. Yo quiero ser lo primero y no lo que viene después”
NOTA: 7,5
PUNTUACIÓN FINAL: 8.55
Se trata de un gran disco, muy
Amaia. Alabo el sonido, la calidad de las letras y la pasión que
Amaia pone en las mismas. Quizás me chirrie un poco la dicción de
la donostiarra en algunos puntos, pero con todo es un trabajo que
deja muy buen sabor de boca. Destaco temas como “Me equivoqué”
que me parece una autentica obra maestra, en todos los sentidos, así
como “Revolución” o “Por ti”... No sé si me convence más
que su anterior trabajo, pero es un camino que creo puede darle
muchos éxitos, pues poco a poco se advierte una personalidad propia,
que cabalga entre el pop más icónico que recuerda a su etapa en
LODVG y sus dos primeros albumes en solitario, y un toque más
guerrero, canalla e incluso fiero, que creo es ese no se qué de la
personalidad de Montero que tan atractivo resulta a muchos.
Enhorabuena artista, has hecho un gran trabajo.
Más Amaia Montero en...