1988. Un año después del exitoso “Valiente” el dúo lanza un disco
diferente, no tanto en cuanto a sonido sino sobre todo a intención. Pimpinela
había logrado revolucionar los hogares, puesto que ahora las mujeres se sentían
más fuertes en la pareja y marcaban sus propias normas por igual. Ello, hizo
mella en algunos matrimonios, y las discusiones en las que ellas salían
vencedoras parece ser que tuvo un tanto irritados a sus maridos. Por ello, un
día a la salida de un concierto, un hombre se acercó a Joaquín y le dijo: “A
ver cuando hacéis canciones en las que ganemos nosotros”, y ese fue el
aliciente para que naciera este disco conocido como “Ahora me toca a mí”. En
cierto modo las ventas se vieron un tanto afectadas por este cambio, sin
embargo, las 10 canciones que lo componen tiene la misma calidad que las demás
y en ellas también se encuentra esa otra parte que a las féminas tanto les
gustaba. 10 nuevas historias deseando ser cantadas… ¿Las escuchamos?
AHORA ME TOCA A MÍ
El hecho de considerar a la mujer
el sexo débil, automáticamente se ha tendido a considerarla la víctima de todo
lo malo que ocurra en la pareja. Esta es la otra cara de la moneda, la
manifestación de porque un hombre, éste en concreto, busca fuera lo que en casa
no encuentra. Decide quitarse el maquillaje, “terminar la función” en la que su
“papel” era el de malo, cuando en realidad ella se escudaba en “yo soy la
víctima porque soy la mujer, la humillada”. Una canción muy potente.
Mejor momento: “Por más que aún siga pensando la gente, que fui el
verdugo y tú la inocente… Ahora me toca a mí, gritar que fuiste una gran
mentira, ahora me toca a mí, no te importó más que tu propia vida, ahora me
toca a mí, tú siempre ausente, fría, indiferente… ¿Y qué esperabas? Sí, te
engañé pero tú lo buscabas… Ahora me toca a mí, ya me cansé de ser siempre el
culpable, ahora me toca a mí, gritar que tú también te equivocaste, ahora me
toca a mí, no me dejaste más que un camino, robar en la calle todo ese amor que
no tuve conmigo”
NOTA: 9.5
ELLA NO QUERÍA
No sólo la infidelidad es motivo
de crisis en una pareja. Cuando la situación económica flaquea y es casi
imposible mantener a la familia, la depresión cierne sus tentáculos sobre la
casa. Aunque resulte vano decirlo, quizás un tanto gratuito, es bien conocido
que los hombres se sienten poca cosa cuando no pueden dar a los suyos lo que
merecen, por aquello de que debía ser el hombre quien llevara el dinero a casa.
Esta es la historia de una mujer, que se ve obligada a trabajar, vendiendo su
más desvirtuada intimidad, a escondidas de su esposo y con una sonrisa en la
boca. Es la historia de Manuel y del sacrificio de su esposa…
NOTA: 6.5
FIN DE SEMANA
Soniquete tropical nos enmarca la
idílica historia de dos desconocidos que se conocen, se aman y se olvidan del
dictado del reloj. Romántica, intrépida y entusiasta, así es “Fin de semana”.
Una canción con una magia especial, que le da un toque de ritmo al disco y
parte la acusada tristeza emanada del tema anterior. ¡Bailemos al son de la
bossa nova!
Mejor momento: “Fin de semana, amor improvisado, amor de un día, amores
de verano, cuerpos ardientes, almas solitarias sin futuro, sin pasado”
NOTA: 7.0
BRAVO
¡ESPECTACULAR! Suena pretencioso
empezar así pero es que no existen palabras para describir el tema que Lucía
defiende, en solitario. Una explosión de ironía fluye de su voz, alabando los
logros de su mejor amiga por haber sido
capaz de reconducir su vida y descubrir el amor nuevamente. Pero esa retahíla de
alabanzas se ahogan en su garganta cuando entre aplausos fingidos se ve
obligada a admitir que el hombre con quién ha rehecho su vida, es el suyo
propio. Un drama, una realidad, una lección a aprender.
Mejor momento: “Bravo, porque fuiste una aprendiz sobresaliente, que ha
rendido en poco tiempo un examen excelente, bravo por ser acredora de un
diploma en el amor. Bravo, por brindarle una lección demoledora a esta ingenua
profesora que al final nada aprendió… Bravo, bravo, bravo yo aplaudo por ti,
bravo porque al fin eres feliz… (…) Bravo, por hacerme caso y abrirte paso sin
pensar en nadie. Bravo, por ser tan valiente, buena y obediente, que entre
tantos hombres que pudiste haber elegido, justo elegiste el mío”
NOTA: 10
VIEJAS FOTOGRAFÍAS
Joaquín se muestra más nostálgico
en esta ocasión en su canción en solitario, una compuesta por él y su amigo
Miguel Muscaret. Una mirada atrás, abrir ese baúl de los recuerdos y volver a
experimentar las mismas emociones
agridulces que un día definieron lo que hoy somos.
Mejor momento: “Que mujer tan bonita era mamá, en esta fotografía junto
al mar. Yo caminando a hombros de papá, aún no puedo creer que él ya no está”
NOTA: 6.0
Y rebasando el ecuador del disco
e iniciando la cara B del LP o del Casette, encontramos la primera pelea del
estilo pimpinelesco que todos esperaban. Como las comparaciones son odiosas, no
vamos a decir que se trata más o menos de la misma historia de “Olvídame y pega
la vuelta” (un hombre que regresa a casa luego de haber abandonado a su mujer y
a su familia por otra mujer y que tiempo después vuelve suplicando perdón) que
lo es, sin embargo, esta es mucho más potente y agresiva, y por eso me gusta
muchísimo más.
Mejor momento: “Cuando tuviste que hablar preferiste marcharte en
silencio, y en una carta dejaste el adiós del cobarde perfecto (Déjame entrar,
quiero hablar contigo, es solo un momento), Amigo mío, ya no creo en tus
cuentos… (…) A dormir afuera, a dormir afuera, porque aquí en mi cuarto alguien
me espera”
NOTA: 10
TRATANDO DE EMPEZAR
Siempre me ha dolido cantar esta
canción porque experimentarla te parte en dos. El tiempo después de la ruptura,
cuando aún escuece la herida, cuando nada te consuela y comienza el luto, el
funeral por ese que ha sido el amor de tu vida. Una de sus canciones más
tristes y a la par maravillosas de su discografía. La pena lo inunda todo para
estallar en el estribillo con un cúmulo de rabia, impotencia y dolor que
quiebra la voz, el ánimo y el alma.
Mejor momento: “Se terminó que triste es aceptar que terminó, ya nada
era igual, como te quiero… será difícil… olvidarte amor”
NOTA: 10
NO SOY UNA SANTA
Muchas mujeres han vivido en sus
propias carnes la rabia por no poder salir de la prisión en la que sus vidas se
han convertido, han dado la imagen de una buena esposa, paciente y siempre
dispuesta a servir a su hombre en todo lo que él deseara. Nunca importaron sus
metas, sus ilusiones o sentimientos y eso hace mella en su propia seguridad e
identidad. ¿Cuántas no habrán protagonizado esta canción? Decirle a su pareja
todo lo que se gesta en su interior vomitando todo ese odio y rencor. Una
canción PRECIOSA.
Mejor momento: “Quiero ser como yo soy no como quieres que sea. No soy
una santa, no, yo soy de carne y hueso ¿O es que nunca te fijaste en eso? ¿Es
que acaso tú creías que no tengo fantasías, que no sueño y siento igual que tú?
No quiero ser una santa, no, no, yo también soy de carne y hueso, ser mujer no
me quita el derecho… bájate del pedestal que mientras más alto estás más fuerte
será la caída (…) Me ahoga este disfraz de ingenua y aburrida, yo también tengo
deseos de probar sabores nuevos, se acabó ya la vergüenza yo lo digo otras lo
piensan… hoy volveré a estar en paz conmigo y con mi conciencia”
NOTA: 10
TE VAS A CANSAR
Y llega mi tema favorito, ese que
no es lo que parece, ése que no es una pelea al uso. Reproches y mentiras salen
a la luz al mismo tiempo. Una canción muy diferente y a la misma manera muy “pimpinelesco”.
Duro, directo, agresivo e hiriente… con sorpresa incluida (como casi todas las
canciones en este disco) “Te vas a cansar” es la mejor manera de demostrar que
hay quien debe comerse sus propias palabras.
Mejor momento: “Y entonces tú vas a querer volver, bajo la tierra me
vas a buscar, y tirarás abajo la pared de nuestra casa y no me encontrarás. Y
entonces te vas a querer matar, ¿Por qué lo hice te preguntarás? Y en el
silencio escucharás mi voz, y al fin entonces tú comprenderás que yo tenía la
razón, Que yo siempre te dije la verdad, cuando mil veces te advertí amor, te
vas a cansar… “ (…)
(“Y antes de irme te agradezco,
amor, pero no te preocupes más por mí, que si me marcho es por otra razón que
no me deja ya seguir aquí. Tú sabes bien de lo que hablo, amor, tú sabes bien
lo que voy a decir, y es que si de algo me cansé amor, es del papel que hice de
infeliz, porque te quise más que a nadie, amor, porque aún te quiero mucho más
que a mí… me marcho para no matarlo a él, me marcho para no matarte a ti”
NOTA: 10
GRACIAS JOAQUÍN
Y cerrando el disco un nuevo
agradecimiento, esta vez de la mano de Lucía a su hermano del alma, como bien
hiciera él en “El duende azul” con “Canción para Lucía”. Es bonita, un poco
ñoña y algo pastel, quizás no pega demasiado con la tónica del disco, pero
mejor 10 canciones que 9 ¿No?
Mejor momento: “Porque frente a mí tú estabas cuando te necesitaba,
porque ponías tu mano en mi hombro sin que te llamara, gracias Joaquín…”
NOTA: 6.5
PUNTUACIÓN FINAL: 8.55
No se puede negar que sea un disco diferente, no obstante, no creo que
sea un disco “malo”, más bien todo lo contrario. A pesar de que la crítica
fuera muy duro con él, la nostalgia, el amor, el desamor y otras emociones se
ven plasmadas con voces impecables e interpretaciones sublimes. Lejos de ser un
fracaso, creo que este disco simplemente fue un cambio de perspectiva. Es una lástima
que su espíritu no haya sido nuevamente utilizado hasta el punto de que los
temas en los que los hombres ganas bauticen la obra.
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