La artista a la que le
vamos a dedicaro los próximos días es ni más ni menos que… ¡Conchita!. Concepción
Mendivil, nació el 5 de Octubre de 1982 en Helsinki, Finlandia, y es hoy por
hoy, una de las cantautoras más destacadas del panorama musical. Desde muy
joven tuvo una especial relación con la música, tocando instrumentos como el
teclado o la guitarra y grabando sus primeras maquetas en viejas cintas de
casette. Fue entorno al año 2000, que empujada por sus amigas se subió por
primera vez a un escenario en la Sala Montacargas. Esa grata experiencia hizo
que, de ahí en adelante, recorriera varias salas de la capital española
mostrando su arte. A ello hemos de sumar
su participación en varios concursos y su puesto como finalista en el de
La Latina. Un año después de ese primer encuentro con el público, grabó su
primera maqueta y compagina el mundo de la música con su otra vocación el
magisterio infantil.
Fue en 2006 que
finalmente Conchita logró poner voz a un disco respaldado por una discográdica,
en este caso Nena Music. Éste primer trabajo, sería producido por Juan Luis Giménez
y contaría con la colaboración de uno de los artistas más admirados por la
finlandesa: Antonio Vega. Nada más,
que así se llamaba el disco, salió a la venta un 5 de Febrero de 2007. Su voz
dulce y ensoñadora logró atrapar a una cantidad abrumadora de público que no
paró de tararear, uno detrás de otro, los singles que fueron saliendo para
promocionar el disco siempre que salían en emisoras de radio o televisión. 14
canciones escritas del puño y letra de Conchita fueron suficientes para que se
hiciera un hueco en este mundo tan complejo y llenar cientos de salas por todo
el país. En poco más de un año, alcanzó las 100.000 copias vendidas y se
mantuvo más de 70 semanas en lista. Gracias a este disco, además, Conchita fue
galardonada por Cadena Dial (como Artista destacada) y también por los Premios
por la Música (como Artista Revelación)y Kiss FM (como Artista destacada del
año)
TRES SEGUNDOS
¿Quién no ha estado enamorado de alguien que parece que
ni siquiera te registra? Parecemos sombras en la pared que se van
desvaneciendo, incrustando en la pintura y perdemos vida. “Tres segundos” es la
historia de la adrenalina en el corazón cuando te rozan, te miran de soslayo,
se dibuja una aparente sonrisa, quizás por educación, quizás por algo más. Dulce,
sensible, soñadora, así es la voz de Conchita. Me encanta el estribillo porque
te hace cerrar los ojos e imaginarte levitando hacia tus deseos, escapando como
un globo que surca los cielos esperando encontrar su sitio. Es una verdadera
delicia.
Mejor momento: “Y te
vas, y me muero y te pierdes entre la gente, y aunque sigo ahí mi mano se ha
ido contigo y tira de ti pa’ que vuelvas”
NOTA: 10
PUEDE SER
Ritmito rico con punteo de guitarra. Me encanta. Fresco,
sutil, pegadizo, que te invita a bailar, a cantar, a gritar de alegría. La
canción de las oportunidades, de las que uno se da a sí mismo luego de un
pequeño tropiezo. Lo incierto del futuro es lo que hace divertida la vida,
tanto como misteriosa, por lo tanto, no queramos desgranarla de un tirón,
saboreemos cada oportunidad, saquemos de ella todo lo que podamos sacar. “Puede
ser” es la aventura, el intento y la ilusión ante un nuevo amor, con los pies
en la tierra y sabiendo que todo puede fallar pero… puede que no lo haga
también. (Me encanta el tarareo del final…)
Mejor momento: “Hoy la
vida me dice que me toca a mí eso de sentirme bien”
NOTA: 10
NADA QUE PERDER
Lo cotidiano sigue ahí, en el día a día, en las calles. A
veces es demasiado cruel la bofetada que te da la vida cuando te pone enfrente
a la persona que amas, la que ha rehecho su vida y no sabe que sigue ocupando
el 100% de tu pensamiento. ¡Tratad de componer un discurso mínimamente
coherente en poco más de unos segundos y pretendiendo ser feliz! “Nada que
perder” es el instante del tierra trágame, de sentirte la última porquería del
mundo por no haber sido capaz de superarte. Tus pies quieren correr, tu corazón
aguanta estoicas las lágrimas. Una de los temas más duros, y más fáciles de
comprender y asimilar del disco.
Mejor momento: “Quisiera
ser capaz mirarte y no temblar, decirte que nadie me volvió a besar, no te
logré olvidar, ni lo intenté quizás”
NOTA: 10
¡Cuántos puñetazos habrá mordido mi almohada por esta
situación! Es increíblemente difícil hacerte a la idea de que la persona que
más has querido jamás tiene que desaparecer de tu vida, desaparecer de ti y que
no puedes permitirte el lujo de flojear porque sería tu perdición. A modo de
mantra repetimos una y otra vez “Lárgate, vete, márchate” pero como un
endemoniado disco volador vuelve a nosotros y nos hace gritar, entre lágrimas y
desolación un “te echo de menos”. La más dura de las luchas, cumplir la promesa
de tu felicidad. Otro gran tema… otra gran promesa.
Mejor momento: “Y podré
estar sin ti, aunque con esta herida aprenderé a sobrevivir, y ahora vete,
márchate, lejos donde no te pueda ver, porque duele… márchate… Te echo de
menos, lo ves, otra vez soy yo quien vuelve a perder, te echo de menos, lo ves,
lo ves, cada día que pasa es otro menos sin tu piel”.
NOTA: 9.5
Y AHORA QUE
El dueto con Antonio Vega irrumpe aún con una sombra
cernida sobre su letra. Hay historias que no llegan siquiera a escribirse
porque el simple hecho de pensar en ello acobarda a sus protagonistas, otras
que terminaron y no se dieron segundas oportunidades que también se quedaron en
el tintero, con miles de momentos por vivir que, sin embargo, están presentes
en nuestra imaginación. Esta bucólica canción es parte de mí, de lo que soñé y
deseé, de lo quise hacer y no pude. Tierna y arrebatadoramente sincera.
Mejor momento: “Y lo
hemos hablado un millón de veces, nos irá mucho mejor así, lo hemos hablado, tu
por tu lado y yo por el mío y aún así ¿Qué hago yo ahora con un millón de
besos? Que no me dio tiempo a darte aquella vez”
NOTA: 10
Un juego de niños, el juego del eterno enamorado que sueña
incluso despierto. Cuando la realidad nos niega la mayor, siempre podemos
consolarnos con lo que nuestra imaginación puede hacer por nosotros. Una
canción diferente, un tanto arriesgada, quizás infantil, pero simplemente
genial. En una sola palabra: única.
Mejor momento: “Pero
ahora que te tengo a ti, se me ocurren mil sitios donde amarte, y aunque no
pueda ser así, cierro los ojos y… un, dos, tres… un, dos… tres”
NOTA: 10
DONDE
La primera vez que la escuché me resultó un tanto insulsa
lo reconozco, pero cuando la mastiqué y fui descubriendo sus matices, me
enamoré de ella. Donde es la canción de… ¡La vida misma! Sufrimos por amor, sí,
y creemos que no podremos recuperarnos, también, pero entonces… algo sucede,
todo duele menos, aparecen otros horizontes y nos preguntamos… ¿Dónde quedó lo
que fue? ¿A dónde voy ahora? La vida… sin más, así nos lo muestran Juan, Lucía
y Raquel…
Mejor momento: “¿Dónde,
en qué momento, en qué palabra, se deja de querer? ¿Y donde, en qué lugar, y
por qué razón, se deja de sentir? Juan no piensa ya tanto en Lucía, porque ya
se acostumbró, ahora confunde amor con rutina, pero aún ni lo entendió”
NOTA: 8.0
Si me quieres, dame mi espacio, dame mi tiempo y ayúdame
a ser yo misma de nuevo. Seguir adelante es complicado pero la mano amiga, el
amor pretendido pueden resultar de gran ayuda. Pero no hemos de forzarnos y
cauterizar las heridas sin que sanen dejando cicatrices. Con un sonido más
intimo y recogido, “Encaja mi corazón” pide comprensión a cuenta gotas. Simple
pero extraemocional. Imposible no conmoverse.
Mejor momento: “Y si
falta alguna pieza es que me la partieron, y aún estoy arreglando”
NOTA: 9.5
NO SALGAS CORRIENDO
¡Qué grande! No sé si a los hombres os pasará igual pero
a las mujeres sí, y mucho. Tal vez seamos unas románticas pero nos gusta el
compromiso, el saber que tenemos a alguien ahí, que nos quiere y nos valora,
que quiere compartir su vida y sueños con nosotras y que no teme a todo eso por
muy grande que suene. “No salgas corriendo” es la afrenta a esa gran palabra “compromiso”
y entre guitarra y guitarra, palma y palma, con un ritmo acelerado, divertido y
sugerentes descripciones de lo que es y queremos que sea, se pinta una
situación más cotidiana de lo que jamás pensamos. Perfecta de principio a fin,
la historia de nunca acabar de las mujeres (quizás hombres también, no lo sé)
enamoradas.
Mejor momento: “Entre
tus labios y mis caderas, solo me estorba el edredón… Y otra vez he de morderme
la voz no sea que vuelva a hablar de dos antes de tiempo y es mejor que no
salgas corriendo”
NOTA: 10
No podía faltar… el tercero en discordia, el que
introducimos nosotros, sin querer pero sin poder evitarlo. ¿Cómo confesarlo?
¿Cómo decir que ya no hay más? Es sencillo imaginar la situación, ese montón de
pensamientos carcomidos, discursos que se escriben y retractan, todo por no ser
cruel, aún sabiendo que doler, dolerá… ¿Cómo dejar de sentirte la más mezquina
de las personas cuando la vida te sorprendió y te obligó a enamorarte… sin
querer? Mucha melancolía, mucha pena y más culpabilidad es lo que se respira en
esta canción. Sobrecogedora… fascinante.
Mejor momento: “Intento buscar las palabras, no causar tanto
dolor, intento ordenar las palabras que suenen algo mejor, y las ponga como las
ponga cada vez suena peor, y a ver… como te digo eso a ver, a ver cómo te
explico eso, que es que me encantó”
NOTA: 8.5
TONTA
¡La canción estrella! ¡La verdad supina con mayúsculas y
luces de neón! ¡Lo que todas pensamos en definitiva! SI alguien tiene que
ocupar el puesto que yo dejé o me obligaron a dejar, que al menos sea ocupado
por una incompetente, fea e inaguantable mujer. La vida misma… nuevamente, en
una canción divertida, rencorosa y a la par despechada. Los gritos del corazón.
Mejor momento: “Espero que
sea, espero que sea tonta, muy tonta, y que le cueste hablar un ratito seguido
sin parar. Tonta, idiota, de esas que no paran de reír y no saben cuando callar”
// “Tonta, muy tonta, y algo fea que eso nunca viene mal, y espero que te
canses pronto y me vengas a buscar” // “Y espero que pienses en mi, que cuando
la abraces recuerdes mi forma de besar, y espero que pienses en mí que cuando
te arrepientas aún sepas donde me has de buscar… (…) yo mientras te espero sentada… imaginándome a
la tonta con el tonto que me hizo llorar” // “Tonta, muy tonta, de esas que si
no hay muy cerquita un espejo no saben donde mirar”
NOTA: 10
Reducimos el ritmo para hablar nuevamente del desamor, de
ese momento en que queremos comprender que todo terminó pero algo se resiste en
nosotros, y es por el simple hecho de que un día fuimos felices, tan felices
que no queremos soltarnos de ese bastión, de esa fortaleza que se construyó y
ahora yace en ruinas. Bonita canción de resignación subyugada…
Mejor momento: “Y he
intentado no caer en la trampa, no dejarme llevar por la rabia, mientras soñaba
con encontrarte. Y me cuesta entender que todo se acabó”
NOTA: 7.5
ALGO BONITO
Y, aparentemente, cerramos el disco con esta bonita
balada que nuevamente nos habla de despedidas. Buenas intenciones para finales
amargos. Muy dulce…
Mejor momento: “Difícil
escribir algo bonito, se trata de un final, no acabaré con “un te quiero” no me
dio tiempo a llegar”
NOTA: 7.5
ÚLTIMA VEZ
Y ahora sí, terminamos el disco con un portazo emocional.
Hay historias que nos lastiman en lo más hondo, nos hunden y pueden hacernos la
vida un infierno, pero siempre se puede alzar la mirada, levantarse y seguir.
En “última vez” se cierra la puerta a la segunda oportunidad y se le da la mano
al espíritu de “Puede ser” en una balada a piano y voz… exquisita.
Mejor momento: “Última
vez que lo repito, última vez que te lo explico no quiero volverte a ver”
NOTA: 9.0
PUNTUACIÓN FINAL: 9.25
¿Dónde radica su éxito?
En que hace canciones sencillas, funcionales y sobre todo reales. La
introspección del alma, una autopsia a las emociones positivas y negativas. La
música de Conchita es el mundo del amor y del desamor desde todos los ángulos
posibles, por eso me gusta. ¡Es música inteligente! Cada una cuenta una
historia, una historia distinta, sin dramatismos, sin golpes de voz potentes,
porque no hacen falta, son únicos y genuinos y eso es lo que la hace grande. No
decepciona jamás.
Me ha gustado la review, pero no coincido en nada en un tema. No me gusta la canción TONTA. Ahora la digiero más, pero antes no la soportaba. La historia esta bien, es divertida... pero hay algo que me hecha para atrás. ¿Mi favorita? Puede ser!
ResponderEliminarEs que Tonta es muy de mujer... es lo que toda mujer siente cuando sabe que su ex está con otra. Rabia, decepción y un orgullo importante es lo que nos define en ese momento. Entonces nos sale la vena de bruja, maldiciendo todo lo que podemos y más... Me encanta porque es súper inocente y al mismo tiempo hiriente... Es genial!
Eliminar¡Éste lo tengo! Me gusta, sobre todo, "Nada que perder" y "Tonta"
ResponderEliminarJejeje... es buenísimo, como todos los de Conchita, la verdad... El último es... IMPRESIONANTE
EliminarYa el resto nos los escuché...A ver si les dedico un rato, porque seguro que tus críticas me dan muchas ganas de hacerlo.
EliminarHazlo!! No te arrepentirás!!
EliminarGenial review!! Coincido en muchas cosas. A mi encanta este disco!! Conchita es una gran artista y sus letras te acaban enamorando y como dices son canciones sencillas pero que te llegan.
ResponderEliminarMis favoritas son Nada que perder y Tonta.
Muchas gracias Mari Carmen!!! La verdad es que Conchita es una artista, este es mi segundo disco favorito suyo... y sí... Tonta es de lo mejor, aunque mi segunda es "Un, dos, tres"
ResponderEliminarMe alegro de leerte!!
Me encanta todoooo el disco está lleno de Himnos por destacar alguna Tres Segundos y Donde y Tonta , pero es que este disco es buenisimoooo todoooo , que gran acierto
ResponderEliminarEs atemporal que incluso se deja escuchar en verano de 2024 por dios es una joyaaaaa no es un disco
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