¡Sí!
¡Ya está aquí! Tras ausentarse de los escenarios por un tiempo,
Pastora Soler vuelve a la carga con su nuevo disco “La Calma”,
que salió al mercado el 15 de Septiembre de 2017, día del
cumpleaños de su pequeña Estrella. Todo lo que rodea a esta
producción de 11 temas, tiene un marcado significado, desde el
lanzamiento del single “La Tormenta” que, casualidad o no,
designa el periodo que atravesó antes de llegar a este punto, hasta
el título del álbum, “La calma”, emoción que habita en ella.
Respaldada por Warner Music Spain, y producida por Pablo Cebrián,
Pastora se codea con grandes compositores de la talla de Vega, Vanesa
Martín, Tony Sánchez-Ohlsson, David Santisteban, Diego Cantero,
Alejandro Martínez, Jose Abraham, entre otros, para crear esta
maravilla que se ha convertido en uno de los álbumes más especiales
de toda su carrera. Disfrútalo...
Cuando
estuve en lo más hondo, en aquél lugar donde no había luz, donde
los problemas parecían multiplicarse y la tristeza se coronaba como
la dueña y señora de mi vida... Llegaste. Llegó la mano que me
guió, la palabra de aliento que hizo resucitar mi ánimo, mi coraje,
mi amor propio... Volví a la vida. Tu fuerza fue un huracán que
arrasó con todas las penas, con las ruinas del castillo de arena que
un día construí.
Estamos
ante una canción que nace delicada, como el mar cuando está en
calma, y que de pronto “Vuelve a la vida” rompiendo, ascendiendo,
sonando atronadoramente reconfortante y cargada de energía. El mejor
inicio posible, no podría haber otro mejor.
Mejor
momento: “Cuando ya ni reconoces quien has sido, cuando crees que
todo es un error, sientes que eres un error... alguien va y se cruza
en tu camino, alguien va y te enseña la mejor lección... que esto
son dos días y uno ya pasó...”
NOTA:
10
LA
TORMENTA
Nadie dijo que esto fuera un camino de rosas. Nadie nos dijo que
llovería sobre nuestras mejillas sin tregua. Nadie nos advirtió de
que dolería, de que de la noche a la mañana algo podría cambiar y
resquebrajar lo que tenemos... Nadie lo hizo, pero no se puede
ignorar la posibilidad de que suceda. Que nos alejemos hasta el punto
de no reconocernos... Pero siempre podemos intentar recuperar lo que
parece agonizar, volver a sentir, volver a intentarlo y aprovechar
una nueva oportunidad.
Un regreso sublime, al más puro estilo Pastora. Un torrente de voz
reviste una canción magistral, bañada en sentimiento y matices, con
una instrumental que recuerda a épocas pasadas... Un single acorde,
que despide la Tormenta que atravesó y se contrapone a la esencia
del disco y del estado en que Soler se encuentra ... “La calma”.
Mejor
momento: “Amor, abrázame tan fuerte que duela, ven y abrázame
tanto que llueva, que mis lágrimas quieren decir... que te quiero”
NOTA:
10
Despedirte nunca fue tan placentero, y créeme no me importa en
absoluto lo que piensen los demás. Fuiste un lobo con piel de
cordero, que me traicionó una y otra vez, sin piedad... ¿Por qué
habría de tenerla contigo? Es el momento de que te guardes esa
carita de cordero degollado y te largues por donde viniste.
La rabia se respira en cada poro de esta canción. Vega, mi
queridísima Vega, es la autora de OPERA PRIMA de “La Calma”, que
en los estribillos tanto me recordó a su extraordinario “Requiém”.
Sin duda el tema más potente, desde el punto de vista emocional, a
la par que contenido (y por ello tan especial) del disco. Lo facil
hubiera sido darle a Pastora un tema donde lucir su potente voz a
base de notas altas prolongadas durante segundos, pero Soler muestra
en esta ocasión otra faceta, más controlada, más visceral, más...
de entraña. Desde ahí nace la historia, el dolor, el rencor y la
paz que brilla tras ese último... “Ni una más”...
Mejor
momento: “Y dirán... que no tuve clemencia para tí... Y dirán...
que no serás capaz de estar sin mí... Y dirán... que digan lo que
quieran ya no tengo la paciencia ni las ganas de aguantarte ni una
más...”
NOTA:
10
PERDÓNAME
Creí que fue bonito mientras duró... pero no. Creí que era feliz
pero... no. Resulta que no era yo quien importaba porque siempre fui
yo... y seguiría siendo yo... la que estuvo en la penumbra,
aguardando por una caricia, por un beso... por ti. Me olvidé de que
tengo dignidad, de que soy merecedora de un amor puro y real, digno
de ser visto, envidiado y deseado por los demás. Es el momento de
pensar en mí... adiós, sigue viviendo tu mentira... No volveré a
ser “la otra”.
Vanesa Martín le regala a su amiga esta preciosa canción que tan
tatuado lleva su sello. Canción con idas y venidas, con ritmos
intrépidos que se balancean entre el dolor y el valor.
Extraordinaria.
Mejor
momento: “Perdóname, si he devuelto uno a uno los besos que ayer me
supieron a amor de trastienda... si vacié todas esas palabras que
llenan discursos sin pies ni cabeza, si prefiero que ya ni me nombres, si te cierro de un golpe la puerta”
NOTA: 9.0
Aunque puedas llegar a pensar que no... siempre será que sí... Que
te quiero, que te necesito, que me completas en cada una de las
facetas de mi vida. Te convertiste en mi todo y sé que, por ti,
sería capaz de hacer cualquier locura...
Primer track que rebaja la intensidad, para jugar con aires a medio
tiempo entre el pop y el flamenquito suave, lo cual me recuerda un
poco al “Brisa de esperanza” de Nuria Fergó. Se aprecian cambios
en la melodía de las estrofas al puente y el estribillo. Un tema muy
correcto, que encaja perfectamente con el perfil de este disco. No es
uno de los temas más sobresalientes del disco, pero es bonito.
Mejor
momento: “Pones mis relojes del revés”
NOTA:
7,0
SERÁ
MEJOR
Hay momentos en la vida en que solo necesitamos parar, respirar
hondo, descansar y volver a batallar, y si en su día me fui, ahora
estoy de vuelta con toda la fuerza y la ilusión que tenía el primer
día.
Desde luego, Diego Cantaro, ha sabido resumir en pocas palabras
revestidas con una melodía alegre y esperanzadora, las vivencias de
Pastora en estos últimos años. Una canción muy inteligente, en la
que Pastora se dirige directamente a su público, uno a uno y todos
al mismo tiempo, para declararle su intención de volver a subirse a
las tablas y cantar... de vivir su pasión. Un tema muy bonito,
aunque a ratos se me queda un poco a medio gas.
Mejor
momento: “Me fui pero será mejor, guardar la manta pal invierno,
sacar esto que llevo dentro, es mi receta y mi pasión (…) Será
mejor volver, a darte mi canción hasta erizar la piel, hacer posible
o que nunca pude imaginar, saber que estás detrás de cada lágrima”
NOTA:
8.5
¿Cómo puedes siquiera dudar de que te quiero? ¿Cómo puedes
siquiera preguntarte el por qué de estar contigo? ¿Es que acaso no
te das cuenta de lo que eres para mí? No importa que lo que tenemos
esté tocado, pues aún no está hundido, y yo... yo sólo quiero
pelear, apoyarte, y aventurarme hacia un destino asida de tu mano.
La sensibilidad es la reinante en este septimo corte. Íntimo,
hetereo, y delicado cual pluma al aire es el marco en el que se
encuadra esta hermosa canción que nos inicia en la segunda mitad de
esta “Calma”,
Mejor
momento: “Si no gritaras a los cuatro vientos cuando no tienes
suficientes fuerzas, si no perdieras la cabeza... ¿Tú crees que
estaría aquí contigo?
NOTA: 8.0
NO
TE ATREVAS A OLVIDARME
¿Cómo puedes irte sabiendo que me quedaré completamente vacía sin
ti? ¿Por qué me enamoraste para luego abandonarme a tu antojo?
Todo lo que te entregué no puede perderse en la nada, como si nunca
hubiera servido, como si nunca hubiera tenido sentido... No te
atrevas a olvidar quien fui, no te atrevas a olvidar el amor que te
regalé... No te atrevas...
Potente canción que rompe con la quietud del “Contigo” anterior.
Se presenta en forma de desamor, de dolor y desesperación, con una
voz herida que reclama atención y profiere reproches y amenazas
aderezada con una fuerte dósis de desolación. Muy buena.
Mejor
momento: “Tengo que decirte que sin ti (…) no soy lo que espero,
que no llego al intento, de lo que quiero ser y no soy”
NOTA: 9.5
Tensaste demasiado la cuerda y se rompió. Olvidaste echar leña al
fuego y se apagó. Y te lo advertí... ¡Cuánto te lo advertí y no
quisiste escucharme! Ahora... parece que nada puede salvarnos. Fue
tan bonito que no puedo creer que esto haya muerto por desidia, pero
es que aunque lo intenta ya no siento absolutamente nada. Te
descuidaste... me perdiste... Lo siento...
Pastora consigue crear en esta canción una sensación
descorazonadora. Esta novena pista es una de las más alabadas por el
público y con razón, porque te transporta y te quiebra los
esquemas. Soler da muestras de su potente voz y sus dotes
interpretativas. Tristemente preciosa.
Mejor momento: “Cuantas veces te dije que el alma, se va
desgastando si no le das alas, que vuelan tan lejos que no existe
nada, que pueda acabar con la furia del mar con la que te miraba
cuando te besaba, cuando te decía que no acabaría, pero esto ya
tiene las horas contadas, porque aunque me muera de miedo por dentro
ya no siento nada...”
NOTA: 9.5
INVENCIBLE
Lo superé porque lo comprendí. Simplemente se terminó y yo no tuve
culpa alguna. Te quise y deseo que te vaya bien, y si te sorprende y
molesta mi fortaleza no me importa, será un problema que no haré
mío, porque he recuperado la confianza en mí misma y soy capaz de
enfrentar cualquier contrariedad.
Optimismo, amor propio, declaración de intenciones de comerse el
mundo y no bajar los brazos. Luego de caer no queda más remedio que
levantarse y Pastora demuestra que lo hace con una fuerza inusitada,
cargada de generosidad y buenos deseos. Es una canción enérgica,
que postularía acertadamente a convertirse en single y con un
mensaje arrollador que perfectamente definiría la situación de
muchos valientes que se atreven a enfrentar la aceptación de un
final y de ilusionarse con un nuevo comienzo.
Mejor
momento: “Ya ni siquiera eres un error”
NOTA: 9.5
Concluimos el disco con la canción más especial para Pastora, que
ella misma compuso junto a José Carlos Gómez, pues está dedicada a
su pequeña Estrella. No hay palabras para describir la grandeza de
un sentimiento tan puro y profundo como el que una madre puede sentir
hacia su pequeña que, además, se ha convertido en su tabla de
salvación y su principal motor para recobrar la ilusión por vivir.
Hermosa.
Mejor
momento: “Vuelvo a cantar para darte mi alma, y dedicarte a ti cada
palabra, todo te lo debo, y aquí estoy de nuevo, dispuesta a dejarme
el corazón mi amor por ti... De repente la vida se llenó de
motivos, con tu luz encendiste los sueños dormidos, que hoy sueñan
contigo,”
NOTA: 7.5
PUNTUACIÓN FINAL: 8.95
El
tal ansiado regreso de Pastora Soler no decepciona a sus seguidores.
Si bien no es un disco que en mi opinión supere a “Conóceme”,
su anterior publicación, se vuelve especial por el simple hecho de
volver a escuchar su voz, de sentirla entusiasmada por vivir su
pasión y congraciarse con el público. 11 historias preciosas, en
las que ninguna sobra y todas se complementan, rodeada de grandes
compositores y músicos. Desde aquí le deseo todo el éxito del
mundo. Gracias Pastora por volver.
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