Blue Bird. Así es como se titula el nuevo trabajo discográfico de una
de las artistas de nuestro país que ha conseguido, fruto de mucho trabajo y
superación, labrarse un nombre dentro de la música. Virginia Maestro, antes conocida
como “Labuat” o “Virginia Labuat”, publica su cuarto álbum el 16 de Octubre de
2015, que pudo hacerse realidad gracias a la recaudación obtenida por el método
crowdfunding en el que participaron
más de 400 seguidores. Muchos han definido a esta artista como la impulsora del
“retro-pop” en nuestro país y no estarían equivocados. Es difícil encontrar,
hoy en día, artistas con una personalidad tan única de hacer música como esta
andaluza. Con su mirada azul abanderando su marea, y esa voz angelical que se
ganó el corazón de los más exigentes críticos del panorama musical como es el
público, la ganadora del ya extinto programa Operación Triunfo, ha puesto en
las 11 canciones que componen su versión estándar todo su corazón. Tanto es
así, que ella misma ha definido su publicación como “El renacer de ella misma”.
Sin el respaldo de una gran discográfica a su espalda, la promoción de su álbum
ya está dando sus frutos, y está consiguiendo que las salas más importantes de
capitales españolas se rifen su asistencia. Su público más fiel se frota las
manos para disfrutar de su arte en una gira que crece por momentos. Radio,
prensa y televisión son testigos del regreso más esperado por muchos. Dejémonos
llevar por este ecléctico trabajo que hondea entre los sonidos retros y los
arreglos más modernos, así como de letras cañeras
y cargadas de emoción.
A veces darlo todo no es
suficiente… y cómo duele cuando así es. Virginia inaugura esta etapa con una de
las canciones más potentes del disco. Estrofas oscuras y seductoras se
entrelazan con estribillos que emanan dulzura y punto de desamor y
desesperación amarga. Su voz resulta tan cálida, tan atractiva… Imposible no
sentirte transportada a otra dimensión. Un sonido muy anglosajón y envolvente.
Una de las mejores canciones del disco… sin duda.
Mejor momento: “The
puppet show put me to blame and I cried, cried, cried”
NOTA: 9.5
MAKE IT ALRIGHT
La carta de presentación de “Blue
bird” no se hace esperar. Continuamos en la senda de su sonido tan distintivo
para adentrarnos en una canción reivindicativa, de darse su lugar. Una relación
a tres en la que no estamos dispuestos a vernos involucrados. Tú decides, te
quedas con ella o conmigo… Hazlo bien. Perfecta de principio a fin, ciertamente
canalla gracias a esas exhalaciones tan sexys y provocadoras y, por supuesto, a
la actitud desafiante y comprometida de Virginia. Quizás hayamos sacrificado el
convencionalismo del “hitazo” porque resuene intensamente y no puedas dejar de
tararearla, pero tiene un rollo exageradamente adictivo.
Mejor momento: “I’m
sorry if you can’t release, it’s evident what it means”
NOTA: 10
¡Parece que el country se ha
colado en la pista tres! ¿Preparado para una trepidante recuperación del
autoestima y el autocontrol? Con apenas 3 minutos y una letra de 12 renglones,
Virginia nos reta a disfrutar de la vida y dejarnos llevar. Para muchos es uno
de los más grandes temas del disco, sin embargo, a mí no termina de convencerme
del todo como para darle tal reconocimiento. Con todo es pegadiza, concisa y
con un mensaje muy positivo… ¡Allá va!
Mejor momento: “Here I
go again I was lost and I found myself again”
NOTA: 6.5
LONELINESS (FOUND)
IMPACTANTE. Creo que no hay otra
palabra que pueda osar describir esta canción. Estamos presenciando uno de los estribillos
más espectaculares y melancólicos del álbum, sin duda alguna. Somos capaces de
detectar tanto en la voz de Virginia como en la melodía de sus cuerdas como la
soledad, la tristeza… lloran amargamente la desazón que sentimos, cuando
perdemos nuestro norte, la confianza en nosotros mismos, y esas aves de rapiña
que nos rodean se aprovechan de ello volviéndonos dependientes de su atención y
su falso amor y reconocimiento. Lo peor, es darse cuenta de que eso sucede y no
ser capaces de hacer nada…
Mejor momento: “Torn
in half my fate is like a snake, the poison fills my veins”
NOTA: 10
No sabría definir del todo bien
la instrumentalización de este tema, pero a mí me traslada a épocas pasadas. Embriaguez,
torpeza, y cierto embelesamiento por sentirse vencido ante la vida es lo que me
despierta esta canción. Golpe tras golpe, mordiendo el polvo, con el alma desangrándose
y la vista cegada de tenebrosa oscuridad, alzamos la voz para clamar por una
ayuda que sigue regodeándose en la nada… Nada va bien, nada funciona… no queda
nada, siento que no soy nada… Nada…
Mejor momento: “I have
no peace of mind”
NOTA: 8.5
ALIVE
Cambiamos de registro para pisar
el escenario de la típica cantina tejana. El medio tiempo relata una historia
de amor desconcertante, que busca la respuesta a un ¿Por qué tanta distancia?
Un amor tan vivo no debería parecer morir, por lo que apóyate en mí, confía en
mí, y cuéntame… Quiero saber.
Mejor momento: “I
wanna know why need I pay this toll”
NOTA: 8.0
Es tan triste tener que decir
adiós… para siempre… para la eternidad. Virginia le dedica este precioso corte
a Álvaro de Rueda Oñoro, un gran amigo con el que compartió momentos increíbles
y que ya… no está. Supongo que todos tenemos alguien que protagonice esta
canción, y quizás por eso, muchos aman este corte, por ser íntimo, puro en
esencia y nacido desde la más profunda y real pena. Simplemente conmovedora,
inspiradora y tremedamente hermosa. Una despedida que suena a reencuentro
futuro.
Mejor momento: “I can
feel you floating all around, but I couldn’t hold you in that round and save,
save me for a while”
NOTA: 10
PLEASE
Parece que la reminiscencia
Labuat sigue viva dentro de Virginia. Este “please” suena tanto a “Dulce Hogar”
que me tiene completamente enamorada. ¿Amigos? ¿Amantes? ¿Cómo puede ser? ¿Cómo
es posible que tú estés enamorado? ¿Estás seguro? Una de las canciones con más
rollo de “Blue bird” y quizás de mis favoritas. ¡Single ya!
Mejor momento: “Break
and shake your heart, can’t you hear it boom?”
NOTA: 10
Y entonces, coge, y vuelve a
sorprenderme. Frescura es lo que se trasluce de esta canción de amor tan
sensacional. Si bien quizás peca un poco de ser demasiado intimista y no
termina de “estallar” creo que es un aporte super original para el álbum, porque…
¿Nadie ha reparado en la MARAVILLA de piano? Esas teclas, ese sonido… picardía,
dulzura, aires retro
Mejor momento: “Past
time is over, Now I’m back to hold you again, now that I’ve reached you, I’ll
seize all days by you”
NOTA: 8.5
ON AND ON
¡La incomprendida del disco! Sí,
es cierto, Virginia suena muy rara, parece que su voz se encuentre algo forzada
por la emoción, por la interpretación, pero creo que eso es precisamente lo que
la hace única y distinta a todas las demás. Para mí, una de las más bonitas canciones
de amor que ha compuesto. Fabulosa.
Mejor momento: “My
senses yearn to hear you, sweetly love you, on and on”
NOTA: 10
¡Despidamonos a lo grande! ¡Sí
señor! El ánimo a tope y un sonido fresco, y apabullantemente intenso. Quizás
estemos ante la más yanqui track del disco, la influencia de Nashville lo
empapa todo esta canción. Es simplemente increíble disfrutar este tema. No
podrás parar de bailar y sentirás que las camperas, los vaqueros y las camisas
de cuadros con chalecos de cuero y flecos recubren tu cuerpo por 3 minutos.
Deliciosamente divertida. “uuuuhhh uuuhhh”
Mejor momento: “I don’t
need to air my dreams in your face to make me feel up high”
NOTA: 8.5
PUNTUACIÓN FINAL: 9.04
SOBRESALIENTE. No podría ser de otra manera. Es simplemente genial
tener a Virginia de vuelta con un disco tan ecléctico, tan bien producido y con
tanto corazón como este. Blue Bird refleja al 100 % el compromiso que Virginia
parece haberse hecho se serle fiel a su yo interior. Su experiencia, vivencias
e influencias se amalgaman en estas canciones y nos dejan ver su mundo
interior, que brilla y brilla, entre temas alegres como “Candy Conditions”, evocadores
como “On and On”, desafiantes a lo “Make it alright”, estrictamente sinceros “THe
best” o de profunda tristeza y admiración como “Places”. No dejes escapar esta
oportunidad de conocer la música hecha con el corazón. BLUE BIRD…